Desde que somos pequeños, los adultos nos cuentan historias
sobre el amor, cuentos que siempre acaban bien, con finales felices, nos dicen
que creamos en el amor, en su magía, que algún día no muy lejano aparecerá
nuestro principito, que será especial y nos querrá toooda la vida.... Pues
bien, eso es completamente y absolutamente MENTIRA, los adultos nos hacen creer
en un mundo de hadas que ni ellos mismos viven, más bien digamos que viven en
un infierno, donde trabajan horarios insufribles para ganar un sueldo mínimo y
llegar raspados a fin de mes, que cuando llegan a casa tienen que aguantarnos a
nosotros quejándonos porque no nos queremos comer las verduras, porque cuando
los padres se acuestan lo que menos tienen ganas es de echar un polvo. Reconozcámoslo
chicas los hombres ponen esa genial excusa de que está cansado de trabajar y
que por eso no tiene ganas de hacer el amor contigo, pero, es que nosotras
tampoco hacemos nada por remediarlo, decimos que no, porque nos “DUELE LA
CABEZA” nos dedicamos a mirar a ese hombre gordo de tanta cervecita dominguera,
casi calvo y recordar que algún día te enamoraste de aquel chico sexy del
instituto y pensaste que duraría toda la vida porque tus padres eso te habían
dicho, entonces chicas y chicos ¿Cuál es el verdadero problema aquí?
El verdadero problema es que tenemos que cambiar las reglas
del juego amigos, no podemos seguir creyéndonos eso de que el amor es eterno,
de que una vez que se encuentra es para toda la vida, porque para que sea para
toda la vida hay que cuidarlo también toda la vida, y eso gente, es algo que
solemos descuidar, debemos de empezar por no decirle a nuestros futuros hijos
las mismas historias bonitas de siempre, seamos realistas por una vez en la
vida, porque de ello dependerá toda su vida, planteémonos que ¿y si nunca ha
existido el amor verdadero? Seamos realistas con nosotros mismos, miremos en lo
más profundo de nosotros de nuestra vida, de los momentos bochornosos que nos habríamos
ahorrado de haber sabido que el amor eterno no existía y no necesariamente teníamos
que encontrarlo. Miremos bien a nuestro alrededor, busca bien la verdad, ¿Cuál es?,
y cuando atiendes te das cuenta que la mayoría de los padres de tus amigas están
separados, que hay miles de mujeres que son maltratadas y otras que mueren a
manos de sus maridos, que hay miles de mujeres que viven con el que en su día era
el amor de su vida y ahora ya no sabe ni quién es, te das cuenta de que tus
padres hace años que viven en la monotonía.
Chicas debemos resignarnos cada vez que nos enamoramos nos
llevamos otro palo más para el historial, debemos darnos cuenta que el amor que
conocemos no existe, hay que cambiar la idea de amor que tenemos, porque… ¿Por
qué tiene que haber un hombre perfecto? ¿Qué cualidades son perfectas y cuales
no lo son? O lo que es peor ¿Quiénes somos
nosotros para decir que es lo correcto y que no lo es? No somos nadie para
decir lo que es perfecto y lo que no.
Conclusión: los hombres son simples, lo que vemos en las películas no es real, y chicos y chicas si de verdad queréis que funcione
vuestras relaciones, no las abandonéis cuidarlas día a día con mucho cariño y
amor como las cuidabais el primer día, disfrutemos de lo que tenemos, no
esperemos nada del amor y así la sorpresa será mayor, CAMBIA TUS REGLAS DEL
JUEGO y sobretodo y lo más importante haz lo que te dé la gana pero siempre y
cuando mientras seas FELIZ.
Así es la vida, María…